La Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos (FNETH) lleva desde 2004 trabajando para mejorar la calidad de vida de las personas con enfermedad hepática. Esta importante labor la realizan, principalmente, ofreciendo 4 servicios gratuitos a personas con esta patología: alojamiento transitorio, atención psicológica, asesoría jurídica y acompañamiento y voluntariado.
Además de esto, la FNETH busca sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de la donación de órganos y de la detección precoz de cualquier enfermedad hepática, así como su prevención.
La labor de la FNETH se expande por todo el país y, teniendo en cuenta todos los ámbitos y proyectos en los que trabaja, contar con unos procesos internos eficientes es esencial para el óptimo funcionamiento de la federación. Es por ello que la FNETH está certificada en ISO 9001, una norma internacional de gestión de calidad que tiene como objetivo mejorar la eficiencia y la satisfacción del cliente mediante procesos organizados, controlados y en continua mejora.
Hablamos con Germán Corbacho, responsable del equipo de comunicación de la FNETH, quien ha compartido con nosotros cómo la certificación en la norma ISO 9001 ha tenido un impacto positivo en la organización. Con más de cinco años dentro de la federación, Germán coordina al equipo de comunicación y supervisa tanto la imagen institucional como las comunicaciones internas y externas. Además, forma parte del equipo de calidad junto con las demás coordinadoras de los distintos equipos para asegurar la excelencia en los procesos de la entidad.
¿Qué os llevó a tomar la decisión de certificaros en la ISO 9001?
La principal motivación fue tener una herramienta capaz de demostrar una calidad y una transparencia en nuestros procesos de trabajo con el fin de ser mejor vistos ante la administración y otros financiadores que nos puedan proporcionar financiación para dar continuidad a nuestros proyectos. La norma ISO 9001 comenzaba a ser exigida en determinadas convocatorias, y también es visto con muy buenos ojos por muchos financiadores e incluso otras entidades con las que tratamos, tanto a nivel nacional como europeo. Podemos decir abiertamente que tener un certificado de gestión de la calidad conforme a ISO 9001 nos ha abierto muchas puertas.
¿Cuáles fueron los principales retos o problemas que queríais abordar con la implementación de esta norma?
Quizás el principal reto fue adquirir un conocimiento completamente nuevo para los miembros del equipo de calidad que se formó para hacer posible la obtención del certificado y su posterior mantenimiento. En FNETH tenemos un equipo multidisciplinar con perfiles muy focalizados en cada una de nuestras competencias, y no teníamos a nadie que tuviera experiencia previa en materia de calidad. Por tanto, ponernos al día y adquirir estas herramientas fue un gran esfuerzo inicialmente, pero a largo plazo nos ha hecho más versátiles.
¿Qué áreas o departamentos dentro de la organización estuvieron más involucrados en el proceso de certificación?
Nuestro equipo de proyectos fue el que estuvo más involucrado inicialmente en este proceso, al ser las dos compañeras que comenzaron el proceso ambas de ese departamento y conocer de primera mano las necesidades de la entidad y lo que se nos exigía. Con el tiempo, otros miembros del resto de los equipos se han ido incorporando con el fin de involucrar a todas las partes de la entidad en el mantenimiento de la certificación y la mejora continua de nuestros procesos.
¿Cómo fue el apoyo recibido por parte de BMC Assurance en relación a la certificación?
BMC Assurance nos ayudó en el proceso de renovación del certificado que se hizo el año pasado. Estamos muy satisfechos con las facilidades que nos dio para hacer la transferencia de nuestro certificado y comenzar a trabajar con ellos.
Desde la implementación de la ISO 9001, ¿qué cambios significativos habéis notado en el funcionamiento interno de la organización – tanto a nivel externo como interno?
La ISO 9001 nos ha servido para mejorar nuestra organización interna, ya no solo para mejorar nuestra candidatura a diversas financiaciones, sino también para manejar de forma más transparente la información dentro de la propia entidad, como por ejemplo hacer un seguimiento mejor de los diferentes perfiles con los que contamos en el equipo (mediante evaluaciones de desempeño, carreras profesionales), mejorar nuestras comunicaciones, tener un mejor control de nuestras fortalezas y debilidades en el contexto social y político actual y plantearnos nuevos objetivos a los que aspirar para continuar mejorando.
¿Cómo influye la certificación ISO en los servicios ofrecidos por la organización? ¿Se ha notado una mejora en la calidad de los mismos desde la implementación?
Con la implantación del certificado ISO 9001 y el sistema de gestión de calidad hemos podido comenzar a percibir mejor nuestros puntos flacos y reforzar nuestros puntos fuertes, y eso se ha reflejado en una mejoría del enfoque que seguimos para adquirir nuevos financiadores, y como consecuencia de ello un cambio en la naturaleza de los proyectos con los que llegamos a nuestras asociaciones y sus usuarios, que cada vez tienden a ser más creativos, innovadores y firmes.
¿Habéis identificado nuevas áreas de mejora gracias a la ISO 9001?
Por supuesto, desde la implantación del sistema de calidad en 2021, hemos descubierto áreas de mejora que hemos ido cubriendo. Al final, el cometido del sistema de calidad es asegurar la mejora constante de los procesos de trabajo de la entidad.
¿Qué consejo les daríais a otras organizaciones similares que estén considerando adoptar esta certificación?
Aunque inicialmente puede suponer un gran esfuerzo, implantar un sistema de calidad y obtener la certificación ISO 9001 puede favorecer mucho el trabajo y ayudar mucho a la mejora de cualquier entidad. Definitivamente es un esfuerzo que vale la pena.
